Bailarines

Bailarines
Parque los Delfines. Grupo de Baile "TNT, dinamita explosiva"

2 feb 2012





LA CRÓNICA:




EL BARRIO

Era viernes y desde que llegamos le entregamos al barrio  nuestras expectativas y él las recompensó con la satisfacción que se nos quedó por haber visto tanta espontaneidad. Tanto deleite por un baile al que apenas si habíamos oído mencionar.







Llegamos en una papagayo 7 que tomamos en la universidad y que atravesó  deprisa la Avenida Simón Bolívar y nos dejó enfrente de una estación de gasolina que da a la SIJIN del barrio Ciudad modelo. Desde la carretera, saltaban a la vista los diversos negocios que entre talleres de mecánica, una droguería, un motel y una academia de conducción, remarcaban la presencia a ultranza de la actividad económica en la zona. Aunque ningún equipo de sonido sonaba a esa hora, algo en la atmósfera nos revelaba la riqueza rítmica y melódica que se cuece entre las cuadras del barrio, y que luego corroboraríamos, se vivifica en las rumbas que se llevan a cabo en cualquier casa hasta el amanecer. Tratando de adivinar qué había más allá de la Simón Bolívar – que en ese tramo es la entrada al barrio- vimos izarse las banderas de Colombia, Cali y una “Y” mayúscula que pertenecen al colegio Yizfred; caminamos más y vimos el supermercado mercaunión que confluye junto con las tiendas, cacharrerías y otros negocios, en un atractivo mosaico que le dan a la calle 40 una imagen de polarizada economía; el ambiente era cálido, por lo que nos disponíamos entusiastas a realizar una entrevista, muchas veces aplazada por los compromisos académicos. Esa tarde del 17 de Diciembre, nos aguardaba en el parque recreativo ´´Los delfines´´, un emotivo e interesante diálogo con el baile y género del Dougie.

El barrio se llama Unión de Vivienda Popular y comparte la comuna 16 con los barrios Antonio Nariño, República de Israel, Mariano Ramos y el Diamante. Su fundación data de hace más de cuarenta años. Fue poblado en su mayoría por gente natural de Cali, y otras zonas de Colombia como la costa pacífica, Antioquia y Huila. Ya alrededor de los años 70´s se comenzó a cimentar en el escenario popular, como sitio de concentración de comentadas rumbas, luladas y discotecas entre las que se contaban la de los Palomeque. De otra parte, jalonado por los líderes, la Unión en el ámbito político logró construir instituciones sociales que como la casa de la juventud, le permiten a esta población dedicarse a actividades sanas como la danza artística y la música. Dos cuadras después de este sitio, se encuentra el palenque, llamado así, por la cantidad de personas negras que habitan en los alrededores. El palenque es en sí una sola cuadra, que se ha hecho conocida por la agitación social y musical que ha heredado de los amaneceres de fiesta, lo mismo que por la situación de violencia, que se hace extensiva en otros sectores del barrio y que encuentra sus representantes en algunas pandillas  que ya han dado de qué hablar a las autoridades caleñas.

Nos enteramos por medio de una compañera, que estaba en auge el Dougie, y que en la Unión así como también en otros barrios aledaños, el género que había emigrado desde Estados Unidos, empezaba a colarse en las fiestas de quince años y en cualquier sitio que se prestara para ello. La primera referencia musical que tuvimos del género, fue una canción llamada ´´Esta lipiada´´ del grupo bonaerense Son de aka,  y que por demás nos resultaba jocosa y un tanto grotesca; en años anteriores habíamos tenido noticia de otras canciones que sin hacer parte del Dougie, al menos robustecían el imaginario musical y colectivo del barrio, que como ahora se sigue  abasteciendo del tocadiscos de las emisoras de Cali y las rumbas de calle, que en el barrio son muchas, y de las que se destacan el ´´remate´´, ubicada en la cra 41H y a donde se va a bailar a eso de las dos de la madrugada, para precisamente finiquitar al son del Dougie, alguna fiesta de otro lugar. Es de añadir también, que el banco musical del barrio, lo llenan muchachos que recorren las calles en cicla y a pie con sus minigrabadoras y mp3´s mostrándole sin querer a sus vecinos cuales son los ritmos de su preferencia.

En todo momento y con más preponderancia en los fines de semana, se escucha en el ámbito callejero la estridencia de equipos de sonido que alternan la salsa choque de Cj Castro, la tusa de Casanova, con los discos de grupos que amparados en el rótulo del Dougie ´´encienden´´ - en el sentido visceral de la expresión- los cuerpos de los jóvenes que disfrutan de mover graciosamente los hombros, la cabeza, los pies.





LOS PERSONAJES Y EL BAILE







El sol está a punto de vestirse bajo las ropas esponjosas de las nubes y mientras las calles alardean de una profunda serenidad, el parque de los delfines se encuentra mareado por el abrazo de un género musical, que algunos muchachos aficionados al baile, estrenan en la ciudad.

Nosotras, bajo la mirada curiosa, representativa de un grupo de investigadoras, paseamos nuestros ojos sobre el grupo de adolescentes  perseguidos a su vez por la ansiedad espectadora de algunos vecinos aledaños al lugar en el que ensayan. Los bailarines con gran emoción, aquella que representa el ser entrevistado por estudiantes universitarias, gran garantía para sus pretensiones de popularidad como equipo, al cual le es conveniente obtener reconocimiento para posibles contrataciones, responden los cuestionarios con buena disposición y amabilidad; todos tienen consciencia de lo importante que es argumentar bien bajo un dialecto apropiado. A veces, intimidados por la cámara expulsan ráfagas de inseguridad, pero cayendo en la cuenta de sus actividades como artistas y bajo el concepto que la cultura les ha dado de lo que debe hacer un bailarín famoso, toman una actitud más extrovertida, en la que se dedican a presentarse.
Así, comienzan a contarnos cómo fue el acercamiento de cada uno con el Douguie. Por su parte, Bryan Herrera, apodado y reconocido dentro del grupo como “Bryan Cuca”, quien fue nuestro contacto principal con todo lo relacionado al ritmo musical, nos atiende de manera amable y nos presenta a los demás. Estos muchachos, a pesar de que sus estudios no sobrepasan la educación media, cuentan con un ingenio y carísima que les permite desenvolverse en el mundo. Todos tienen en común su afición por la música y el baile, de la misma forma que poseen la capacidad de reconocer que algunos se expresan mejor. Esto le pasa a “Bryan Cuca”, quien pensando en sus limitaciones expresivas, pide a sus amigos y compañeros que lo apoyen mientras se dirige al lente. Es evidente su falta de seguridad pero, aún así, no deja de comunicarse.



Hasta ese momento ha transcurrido más o menos una hora desde nuestra llegada al lugar. Bryan termina su charla, le sede la silla que hemos designado como el lugar para los entrevistados a Kevin Balanta, quien inmediatamente, al acomodarse en el puesto siente la importancia que les otorga a cada uno la condición de entrevistado. El joven anteriormente nos pidió que le mostráramos las preguntas, pues quería ir pensando cada una de las respuestas de manera concienzuda, ya que en eso radica el prestigio de TNT, Dinamita Explosiva.  Con su discurso, nos damos cuenta de la facilidad expresiva del muchacho, en la que utiliza tal vez de manera inconsciente, argumentos como la ejemplificación, la anécdota y de modelo.

Desde esta perspectiva, aún sin decirlo con palabras, nosotras, hemos caído en la cuenta de que hay un gran potencial en estos chicos. Nuestros ojos reflejan la admiración a sus aptitudes y la preocupación de que no  asistan a una academia que de manera legitima los encause. Guardamos nuestros pensamientos casi de manera sincrónica, centrándonos en la investigación. Kevin ha conseguido mostrarnos un panorama amplio, dándonos pistas de grupos representativos en el género, que muy atentamente copiamos en nuestras notas improvisadas.



Ahora, la cámara enfoca  a Bryan Rodallega, un adolescente de 19 años al que su aspecto físico traiciona haciéndolo parecer de mayor edad. Él no puede evitar, como el resto de sus amigos, moverse rítmicamente mientras nos conversa y aunque la música no esté de fondo, es evidente que ésta los ha embriagado y ellos le han permitido invadir sus seres sin resistencia alguna. Pasados varios días, luego de nuestra interacción con los jóvenes, en el momento de traerlos a colación, recordamos a cada uno por algún rasgo particular que haya dejado su huella en nosotras. Así es como recordamos a Bryan, con el sonido particular que producía el choque entre sus dientes frontales y un piercing en su lengua.




Es claro que los muchachos coinciden en algunas cosas relacionadas con el Douguie, pero de la misma manera salen, como burbujas en la mar, cosas diversas que impregnan nuestro trabajo de un aroma novedoso. Con esto en mente, el nuevo foco de nuestra curiosidad pasa a ser Johnny Castellanos, a quien los compañeros denominan “El enfermero”, ya que ese día su cuerpo se encuentra cubierto por un traje similar al de los utilizados en dicha profesión. Su personalidad está caracterizada por una seguridad acérrima, jamás titubea de sus dotes como buen bailarín y en el momento de realizar ilustraciones del género musical hace los pasos más complicados. Es tanto el convencimiento que tiene sobre sí, que logra transmitirlo a través del lente de la  cámara.  Esa misma seguridad la pone sobre sus palabras y deja sobre nosotras la impresión de querer resplandecer sobre el grupo.

Finalmente, como algo que llama la atención, llega Yoselin con sus pasos lentos envueltos entre las sonrisas que sus amigos le obsequian. La niña del grupo, cuenta con 15 años de edad y es la figura femenina más sobresaliente entre los bailarines, tanto así que fue en la única que pensaron sus compañeros varones en el momento de buscar a las  mujeres del conjunto de baile, para que nos dieran su testimonio. El rostro de ella siempre acompañado por una luz, proveniente de sus dientes descubiertos por los labios, le da un toque carismático que logra atrapar el interés del entorno, a pesar de que es una persona muy tímida. Según su parecer, el Douguie no es un género para gomelos, algo que nos permite entrever puntadas de su pensamiento, un poco arraigado entre paradigmas de estratos socioculturales.

Es de esta forma  como llegamos al grupo de muchachos,  de  quienes por más que quisiéramos distanciarnos por nuestra condición de investigadoras, dejan  una marca que posiblemente sea la que nos abrace cuando escuchemos, de manera casual o consciente, “Teach me how the Dougie” o  en su defecto “Esta Lipiada”. Pensaremos en esos chicos que viviendo en zonas de conflicto permanente, no se han dejado absorber por su imposición, sino que han buscado escapes como la música y el baile, a nuestro parecer, para no caer en la misma problemática de pandillas y todo lo que acarrea esto. Nos sorprende, volviendo a sus imágenes, el haber atestiguado la fuerza de sus personalidades arrolladoras y con enormes talentos, a las que la academia podría brindarles, seguramente, más oportunidades.



MIGRACIÓN: "DE TEACH ME HOW THE DOUGIE" A "ESTÁ LIPIADA"

Ahora,  detrás de cámaras, son muchos los que corrigen  y exhortan a sus amigos a reemplazar sus respuestas. Algunos  a través de un gesto divertido o una señal intrépida provocan en sus “socios” una pequeña risita socavada que gracias a la luz   y al contraste se disimula. A  primera vista, ronda entonces una timidez  aparente, pero  la verdad es que el lente  Carl Zeiss de una pequeña  cámara filmadora fucsia,  asiste junto con   quien filma ante  la  sorpresa que aquellas ráfagas de  espontaneidad y desinhibición  causan en un cuarteto de universitarias al ver  a casi diez adolescentes bailarines  contando sólo una parte de su vida.

 El ambiente  se figura poroso y variado, y con tanta algarabía  hay una especie de regocijo antropológico que embarga aquella tarde soleada, y  por eso suenan risas de vez en cuando, provocadas por alguna ocurrencia jocosa, que definitivamente revela acentos e ideologías diferentes. De pronto resulta que alguien comienza a  escribir,  tomando nota en una libretilla  de nombres y correos electrónicos para no perder el contacto y enviar los videos que ya piensan subir a Youtube,  mas al preguntarle a Bryan sobre sus datos, el joven de pestañas largas y encrespadas, confiesa con vergüenza la escaramuza que provoca el efecto su Nick Name  en extraños:

-Vea, yo tengo un apodo..Umm…Un apodo ahí que…Umm. Es que a mí me diceN Bryan “Cuca”.

 Así,  saliendo del aprieto, revela también lo turbado e incómodo que se siente al tener que responder un par de cosas mientras Kevin, saliendo al paso, ávido y dinámico,  pide que le entreguemos las preguntas para él ir organizando qué responder:

-Mami, dígame cuáles son las preguntas para yo ir pensado.

Y con algo de curiosidad, y tal vez un poco de zozobra, lleva sus manos a la cabeza, preparándose porque ya viene su turno.
Una vez sentado, el joven de tez negra y ojos fisgones, es quien dilucida el tan famoso “Teach me how the dougie”*  y cuenta con una predisposición histriónica en la que parece que quisiera pararse a bailar, el cómo conoció el ritmo a través de un remoto primo gringo que no hablaba ni gota de español, para después entrar en la onda del baile en la que ahora lleva una trayectoria que aunque a pequeña escala, se convierte en significativa para  su vida. El chico, que de todos es el más claro y preciso, resuelve entonces para un panorama aún perdido la influencia  en el Dougie de ritmos norteamericanos como el rap y el hip hop, así como la familiaridad con el Ragga del que se han trasladado varios pasos de baile.

Mientras tanto, pese a ya haber pasado algún tiempo, aún continúan detrás del Carl Zeiss los demás jóvenes y alguien precavido se encarga de demarcar el perímetro cuidando que ningún niño curioso interrumpa la entrevista. Para quién pregunta qué están haciendo ahí, Yoselin de manera tajante y con algo de orgullo, anuncia con su particular sonrisa:

-Esta entrevista va para la Universidad del Valle…!

Y  esquivando el sol, se reviste de una seriedad poco verosímil, para continuar mirando a Kevin, atenta a recordarle qué decir si su compañero llega a verse en apuros.



Finalmente, Kevin retomando su idea, cuenta que el Dougie viene de una no tan lejana tradición musical,  que desde California, Estados Unidos, con el grupo  Cali Swang Disrict, ha inundado las calles de la capital de la salsa, instituyendo  un sincretismo y si se quiere una especie de pastiche rítmico  como el compuesto por Son de AK,  con la tan famosa y popular melodía  Está Lipiada*.  Adaptación contextual e ideológica de “Teach me how the dougie”, pues en tanto melodía repite la percusión y la armonía de la canción californiana.  Al parecer, se podría pensar que el grupo bonaverence ha respondido con algo de folklore y humor,  a través de Está Lipiada, a la muy difundida  polémica que la silicona  ha generado, reconociendo tal vez el fervor popular que ahora en Colombia  se profesa hacia las cirugías estéticas.


*Está Lipiada - Son de Ak:








*Teach me how the Dougie - Cali Swag District:






ALGUNAS OPINIONES DESDE FUERA
 
Es el barrio de ladera Terrón Colorado, estamos hablando con la cantante de música norteña y popular Giovanna Meneses, acerca de qué conoce sobre el Dougie. De inmediato, pone en su cara un gesto de confusión  y al mostrarle un  video en el que aparecen unos jóvenes bailando este género musical, responde con risa burlesca y esgrime un gesto de ´´gas´´. Tal vez su respuesta obedece a que el Dougie es todavía un ritmo poco usual. No obstante, al hacerle la misma pregunta a un joven procedente de este sector, responde que al contrario le resulta un tipo de baile interesante, ya que presenta pasos de baile novedosos.
De nuevo en el barrio la Unión, nos encontramos con Jenny Paola, para quien el baile del Dougie resulta de una excepcional virtud. Se baila así, se agitan los hombros así y  se va formando un divertido aparejamiento en el que el cuerpo se siente impulsado al Bumping. Al igual que Jenny, su hermana opina que ´´Cali no es sólo salsa, y que aquí  se dan otros géneros que también son chéveres´´. En su rostro salta a la vista una risa de satisfacción por saber que ahora el Dougie y un grupo de jóvenes del barrio darán de que hablar con este ritmo.
 Así, las consideraciones en contra y a favor del Dougie, surgen porque posee un baile extravagante y exótico que pocos se atreven a gozar, y que otros deciden usar como estandarte de identidad, personalidad y gusto musical, que de tal modo pretende combatir la idea estereotipada de que Cali es una ciudad en donde lo que más prima es la salsa.
Por :



Yenireth Cortés - Sol Anyela Muñoz Niño - Leidy Tapasco Rojas - Uldrey Julieth Tenorio.

Universidad del Valle - Cali
Licenciatura en Literatura - 9no Semestre.










EL POR QUÉ DEL PRESENTE BLOG

Somos un grupo de estudiantes de la Universidad del Valle, estamos en séptimo semestre de Licenciatura en Literatura y actualmente nos encontramos realizando una investigación, encargada en la materia de Literatura y Música, acerca de expresiones musicales en Santiago de Cali. Este Blog, responde entonces  al producto de dicha investigación, en la que el ritmo elegido ha sido el  Dougie y sobre cual damos a conocer la presente crónica.

Teach me how the Dougie - Cali Swag District